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Lo que es una buena rentabilidad inmobiliaria depende de varios factores, como cuánto vale una propiedad o qué tipo de ingresos por alquiler tiene. Además, también depende en gran medida del tipo de interés que tenga que pagar por la financiación al banco.
Por lo general, la inversión en bienes inmuebles proporciona un rendimiento estable y más elevado que si lo deposita en una cuenta de ahorro. Aparte de los ingresos anuales por alquiler, también puedes disfrutar de la revalorización. Algo que es casi evidente si nos basamos en los últimos 30 años, siempre y cuando mantenga la propiedad el tiempo suficiente en caso de que se produzca una caída inesperada.
Con los alquileres regulares, usted alquila su propiedad durante un periodo de tiempo más largo, normalmente uno o más años. Esto significa que recibe una cantidad fija de ingresos por alquiler cada mes, lo que significa que sabe exactamente cuál será su rentabilidad. La mayor ventaja del alquiler residencial es la estabilidad y previsibilidad de los ingresos. Además, los inquilinos suelen permanecer en la propiedad durante periodos más largos, lo que minimiza el riesgo de desocupación.
El alquiler vacacional, en cambio, se centra en estancias de corta duración. Los inquilinos suelen quedarse unos días, semanas o meses, lo que da lugar a un índice de ocupación muy variable al mes. Aunque este tipo de alquiler implica más trabajo administrativo, como la limpieza y el mantenimiento periódicos de la propiedad, también ofrece importantes ventajas. En concreto, puede cobrar un alquiler más alto por noche o semana en comparación con los alquileres normales. Además, tiene la flexibilidad de utilizar su propiedad usted mismo cuando no esté alquilada, lo que puede ser ideal para sus propias vacaciones.
Invertir en propiedades residenciales puede producir rendimientos atractivos, normalmente entre el 4 y el 5% anual. Además, el riesgo es relativamente bajo, ya que los inquilinos suelen permanecer en la propiedad durante un periodo de tiempo más largo. Sin embargo, si un inquilino se marcha inesperadamente, puede llevar algún tiempo encontrar un nuevo inquilino. Esta vacante puede tener temporalmente un efecto negativo en su rentabilidad.
Para que se haga una idea, le hemos preparado un ejemplo de cálculo. Supongamos que compra un inmueble por 300.000 euros y lo alquila por** 1.500 euros al mes**. Esto supone un**alquiler* brutoanual de 18.000 euros*, lo que representa un**rendimiento* anualdel 6% (18.000 euros / 300.000 euros)*. Para muchos inversores privados, se trata de una rentabilidad atractiva.
Si lo financias con 210.000 euros del banco e inviertes 90.000 euros tú mismo, el rendimiento de tu propia inversión se vuelve más interesante. El banco cobra un tipo de interés del 5%, lo que equivale a 10.500 euros de intereses al año. A medida que vayas amortizando el préstamo, el tipo de interés bajará de forma natural.
En este escenario, los ingresos netos por alquiler son de 18.000 euros - 10.500 euros = 7.500 euros al año. Sobre tu propia inversión de 90.000 euros, esto supone una rentabilidad de alrededor del 8,33%. La ventaja es que puede adquirir varios inmuebles con una participación menor, lo que puede aumentar su rentabilidad global. Sin embargo, corre el riesgo de que suban los tipos de interés de sus hipotecas.
En el caso de los alquileres vacacionales, la rentabilidad puede variar considerablemente en función de la tasa de ocupación. También hemos preparado un ejemplo de cálculo para este caso. Supongamos que compra una casa de vacaciones por 300.000 euros y la alquila por 150 euros por noche con un índice de ocupación del 80%, lo que representa 292 noches al año. Esto supone unos ingresos brutos por alquiler de 43.800 euros al año, lo que representa una rentabilidad anual del 14,6% sobre el precio de compra.
En muchos casos, es difícil financiar una propiedad para alquiler vacacional a través del banco. Esto se debe a que los bancos ven demasiado riesgo en el cambio constante de inquilinos y la incertidumbre en torno a la consecución de la rentabilidad anual. Esto hace que la compra de un piso o una casa para alquiler vacacional sea una inversión considerable. Además, no se reparte el riesgo, ya que todo está en un mismo proyecto.
Afortunadamente, existen plataformas como Valvest que eliminan esta barrera. Valvest ofrece acceso a estas atractivas rentabilidades para viviendas vacacionales sin que usted tenga que implicarse. A menudo puede invertir tan sólo 100 euros y recibir como garantía el inmueble, de forma similar a la contratación de una hipoteca con el banco.
Esto hace que las viviendas vacacionales sean accesibles tanto para los inversores principiantes como para los experimentados que buscan beneficiarse de los altos rendimientos que ofrecen los alquileres vacacionales.
Tanto si es usted un inversor principiante con un presupuesto modesto como si ya es un inversor experimentado en busca de mayores rendimientos, Valvest le ofrece la mejor solución para invertir en alquiler vacacional. Centrándonos en rentabilidades fijas y atractivas, hacemos que la inversión inmobiliaria sea accesible y merezca la pena para todo el mundo.
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Invertir en el sector inmobiliario solía ser difícil y complicado.
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